domingo, 17 de abril de 2011

Presentando armas

Foto: Realmadrid.com

Mourinho planteó ayer el partido como lo que era, la antesala de una gran final. No se podían hacer locuras que comprometiesen el partido del miércoles ni tampoco dejar que fuese un paseo militar para los visitantes, nobleza obliga. Y más o menos ese fue el guión.

En la primera parte el Madrid destacó por su excelente colocación sobre el césped y la asfixiante presión en el centro del campo, muy reforzado por la presencia de Pepe en el mismo. El portugués dominó a la perfección su radio de acción y puso las cosas muy difíciles al centro del campo azulgrana. Por si fuera poco, fue el vivo ejemplo de la actitud y el autocontrol con la que se tienen que afrontar estos partidos: con sangre en el ojo y sin conocer a nadie durante los 90 minutos. Antológica su bronca a Messi tras su humilde gesto de dar un pelotazo intencionado a varios espectadores del Bernabéu.

Ahora que mencionamos al público, parece que algo se le ha conseguido educar. Ayer hubo muchos minutos de riesgo tras el 0-1 y la expulsión, el Madrid se vio obligado a emplear unos minutos en recomponerse y el Barcelona aprovechó para sobar el balón de una punta a otra del campo, sin demasiado peligro, todo hay que decirlo. Lo normal en esas situaciones es que empiece a escucharse un murmullo de desaprobación y al poco empiecen los pitos de los entendidos de siempre, pero ayer se oyó a Chamartín apoyar a su equipo cuando peor lo pasaba, refrendando las buenas sensaciones de las últimas semanas en cuanto a la salud del madridismo de grada.

Los cambios ayudaron a que el Real no se estancara. La entrada de Özil (suplente a todas luces para tenerlo al 100% en Mestalla), le dio nuevos bríos al equipo, y en estas que tanto esfuerzo con un hombre menos tuvo su recompensa con un penalti sobre Marcelo. 1-1 y gol de Cristiano, que se quitó así de encima la estúpida presión que la prensa le quería echar encima por no haber logrado nunca un tanto contra los azulgranas. Pese a provocar unos minutos de nerviosismo al final entre el enemigo, la cosa quedó ahí y ambos equipos se repartieron los puntos. La Liga estaba ya perdida desde el día del Sporting, quizás antes por la corrupción que pudre las entrañas del campeonato, así que tampoco es para echarse las manos a la cabeza. Todos hubiéramos estado mucho más contentos con la victoria, pero dadas las características del partido (40 minutos con 10), quedémonos con el hecho de haber plantado cara sin necesidad de descubrir la totalidad de nuestras cartas antes de la final de Copa.

Hablaba el viernes de lo acontecido en la polémica rueda de prensa de Karanka, pero la de ayer es para grabarla y archivarla en la sección de grandes clásicos de la historia del Real Madrid. Mou se negó a hablar con los medios de los periodistas que el día anterior habían menospreciado a su segundo a menos que fuera el propio director el que preguntara. Los hay que si no es así no aprenden. Hacía años que nuestros entrenadores deberían haber reclamado el respeto que merecen.

Otro tema que también trató el luso fue el arbitraje. Pese a que muchos quiseron desplazar la polémica a supuestos penaltis a Villa, existentes solo en su perturbada imaginación, lo cierto es que lo que clamó al cielo fue la diferencia de criterios. Mientras que Albiol es expulsado inmediatamente tras agarrar a Villa, Alves no corrió la misma suerte tras cometer un penalti. No es ya que no viera una roja directa que hubiera dejado a uno de los pilares de la defensa barcelonista fuera de combate para el miércoles, es que teniendo una amarilla ya... ¡Muñiz no tuvo lo que hay que tener para sacarle otra! No es de extrañar el enfado de nuestro técnico. La historia de las expulsiones nunca se vuelve en contra del Barcelona, ni por casualidad, y esto ya huele.

No vi a un Barcelona tan distinto al de otras veces. Este año seguí su partido contra el Hércules en Alicante y fue muy parecido: mucha posesión, infinitos pases de una banda a otra y en ese caso tres goles en las tres o cuatro ocasiones claras que le permitió un rival netamente inferior. Ayer tenían un señor equipo enfrente, pero aún así el jugar 11 contra 10 les dio mucho oxígeno. No les veo con tanto margen de maniobra para cambiar su juego como el que posee el Madrid, que podrá poner más intensidad a la novedosa disposición táctica de ayer, aplicarse en ataque y no reservar absolutamente nada.

6 comentarios:

  1. En mi opinión, el Madrid hizo una buena toma de contacto para lo que será la guerra del miercoles: buena concentración, presion, espacios bien cerrados, no dejarles pensar, quitarles las referencias...

    Hay quien ya se ha apresurado a meterse con nuestro juego de ayer. Al parecer solo podemos ser admirados como el Barça, jugando como el Barça, y aún asi alguno diria que "jugamos ramplon y como un equipo pequeño" con tanto toque en corto y tanto rondo. Demencial.

    Yo en el Madrid de ayer vi mucho trabajo, muchas horas viendo videos del rival, muchas tardes entrenando. Bonito o no, asi hay que jugarle al Barça.

    Un saludo desde http://lanaranjamerengue.blogspot.com/

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  2. Buen clasico, se vivio, ayer, falto la emocion y los goles. Saludos!

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  3. Esto es lo mismo de siempre, lo que nos llevan contando ya unos añitos. Cada vez que un equipo les complica en su juego siempre son las mismas excusas, que si ellos son los únicos que han intentado jugar, que si el otro equipo jugaba al patadón, que si como los equipos pequeños...más vergüenza entonces les tendría que dar a ellos no haber sido capaces de ganar a un equipo con 10 casi medio partido y de casi haber perdido el partido. Todo eso con su súper juego, el de aburrir a las ovejas. Si algún madridista quiere que nuestro equipo juegue así apaga y vamonos. 80% de posesión para no acercarse a Casillas. Pero claro, es su táctica, tienen que provocar a los equipos diciendo que no quisieron jugar para que a la próxima les salgan a jugar al toque como ellos y les metan 5, como le pasó al Betis o al Shaktar. Esa es su táctica, y la tienen bien montada, prensa y afición les respaldan, aficiones ajenas también e incluso algunos madridistas también les respaldan. En fín, el miércoles más y esperemos que mejor...quizá Mourinho nos sorprenda y saque a Kaká, aparte del cambio Özil-Di maría que se preve bastante probable...

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  4. Poco más que añadir. El resumen del primer párrafo deja claro las intenciones de Mou.

    Qué ganas de que llegue el miércoles

    Un saludo desde Diario digital madridista!

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  5. Yo estoy hecho un manojo de nervios... se debe acabar el "volveremos". YA ESTAMOS AQUÍ.

    ¡HALA MADRID!

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  6. El Miercoles hay que demostrar que somos el Madrid y Mourinho va a salir de inicio con:
    Casillas; Arbeloa, Ramos, Carvalho, Marcelo; Alonso, Khedira, Pepe; Ozil, Di María y Ronaldo.
    ese es el equipo titular según mi opinión. saludos

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